ViaVia: desde Bélgica a Valparaíso


Dirección: Almirante Montt 217, Cerro Alegre, Valparaíso / Teléfono: (32) 319 2134 / Facebook: @viaviavalparaíso / Instagram: @viaviacafe_valparaíso / En la web: http://viaviacafe.cl/es/


Entrar a ViaVia es una experiencia. Ya sea que bajes o subas, el espacio se "descubre" entre una vegetación hermosa y bien cuidada. La casa tiene un bello estilo Art Deco que se encuentra en perfecta sintonía con el entorno.



Al entrar, pude conocer a Wilson Guevara, uno de los dueños, quien claramente está enamorado de su proyecto y eso se nota de lejos. Lamentablemente no pude conocer a Ewoud Desmet el otro dueño, pero ya se dará la oportunidad.

El proyecto ViaVia nace en Bélgica. El objetivo es difundir esta cultura en países diversos y por eso ViaVia está no solamente en Valparaíso sino también en ciudades como Buenos Aires (Argentina), Ayacucho (Perú), Copan (Honduras), León (Nicaragua), Dakar (Senegal), Katmandú (Nepal), Yogyakarta (Indonesia) entre otros.



Ewoud y Wilson -ambos belgas- comenzaron entonces una travesía por Latinoamérica y luego de visitar la experiencia en varios países, al conocer Valparaíso supieron que este sería el escenario del futuro de ViaVia.

Restauraron la casa original con materiales originales reciclados, tales como el adobe, madera reciclada y las ventanas de fierro.



Pero además, Wilson comenta un tema clave: la sustentabilidad ecológica y laboral como piedra angular de este proyecto.

Ser 100% ecológico es prácticamente imposible, pero hacemos lo mejor que podemos por reducir al máximo nuestro impacto en el medio ambiente. Un ejemplo de esto es que usamos energía solar para calentar el agua de la cocina y el hotel. Además, las habitaciones cuentan con termopaneles para aislar y mantener el calor.
En cuanto a la basura, tenemos una política de reciclaje que es bastante estricta y para cumplir con ella, constantemente estamos concientizando a nuestro personal. Acá reciclamos el papel, los plásticos, los vidrios, incluso las latas.

Otro ejercicio consciente de ViaVia es el tratamiento del agua. El agua sucia de la cocina se filtra en una cámara desgrasadora con el fin de hacer el menor daño posible.

Una de las cosas que nos enamoró de esta casa son los jardines. Las áreas verdes que le faltan un poco al centro de la ciudad. Por eso, seleccionamos cuidadosamente las plantas de nuestro jardín, y elegimos aquellas que usan un mínimo de agua para optimizar el uso de recursos hídricos y las cuidamos con el humus que sacamos de nuestra compostera, donde nuestras lombrices se hacen cargo de descomponer los residuos orgánicos del local.

A parte de los objetivos ecológicos, también buscan provocar un impacto positivo en el barrio y en la ciudad, por lo tanto el lucro social forma parte de su filosofía empresarial.


Wilson me cuenta que una de las funciones más importantes de ViaVia es el respeto por todos y cada uno de las personas que le dan vida a este proyecto. Si bien, hay cargos claves dentro de esta estructura para asegurar el óptimo funcionamiento, el respeto por cada uno de los integrantes de este equipo es fundamental, así como el apego riguroso a las leyes laborales.

"Nosotros queremos el mejor ambiente para nuestros clientes y para eso hay que partir por casa. Acá hacemos lo posible para que todos se sientan valorados y queridos, para que todos estemos felices de trabajar en este lugar. Eso se transmite a las mesas del restaurante así como también en la experiencia de hospedaje. Además, nos importa mucho el desarrollo profesional de quienes trabajan con nosotros y por eso fomentamos el que estén constantemente profesionalizándose y mejorando"

En cuanto a la comida, te puedo contar que ViaVia maneja una carta internacional que se nutre de la red de ViaVia en el mundo. Obviamente, para garantizar los mejores ingredientes, se elabora una carta estacionaria que cambia 2 veces al año. Por eso hay carta de primavera-verano y otoño-invierno, siendo el concepto principal la idea de bistró: 

Acá se sirve comida casera y a precios amigables dentro del sector. Puedes pedir relajadamente un plato de estofado borracho, por ejemplo, con una rica cerveza belga (que es una de las mejores del mundo a pesar de que todos piensan que es la alemana) o puedes pedir una rica carbonada a la flambeau y te va a llegar un plato como en casa y nada intimidante como ocurre con algunos espacios de alta cocina. 

Para que te hagas una idea, también puedes pedir croquetas de queso que es un plato belga exquisito, preparadas con gruyere, parmesano y perejil frito y eso vale $3.500 pesos. Eso lo puedes acompañar con una cerveza refrescante cono la Liefmans Krierk que es una cerveza roja, frutal, fermentada en cerezas.



En ese momento Wilson le pide amablemente a uno de los garzones que nos sirva una y ¡Paf! me enamoré inmediatamente de la cerveza. 

Luego saca la carta y me muestra una variedad muy amplia que además informa ya que cada nombre va acompañado de los grados de alcohol para que luego no quedes pegado a la silla sin saber cómo pasó.

Un imperdible de ViaVia son los wafles. Son típicos belgas ya que nos trajimos la máquina desde Bélgica. La preparación es la original con masa reposada y son muy diferentes a cualquier otro wafle que puedas comer en la oferta local.
Para finalizar, yo personalmente recomiendo el fish & chips de merluza, reineta o congrio, dependiendo de si hay veda ya que la sustentabilidad es fundamental en ViaVia.

Para los veganos y vegetarianos también hay oferta ya que la inclusión es también un norte. Acá TODOS son bienvenidos.

Para quedarse, ViaVia ofrece piezas adorables y confortables, pero especialmente el loft es increíble. Está completamente equipado para que te sientas como en casa sin que nada falte.

¿Cómo llegar?


Comentarios